Gracias, una sola palabra para un millón de agradecimientos..
Oniria nació como un ambicioso proyecto educativo que consiguiese llevar a escena una producción musical completa con baile, actuación y música en directo, haciendo que nuestro alumnado viviese esa experiencia profesional.
Pero somos conscientes que Oniria se ha convertido en mucho más que eso: es trabajo en equipo, esfuerzo, generosidad, pasión, altruismo y sacrificio por parte de todos y cada uno de los que forman esta gran familia. Somos docentes y nos apasiona nuestro trabajo, pero Oniria ha conseguido emocionarnos en cada representación y por ese motivo queremos agradecer a todos los que habéis hecho posible que volvamos a vivir la magia de Oniria:
En primer lugar, queremos agradecer a todo el alumnado participante, y sin el que este proyecto no tendría sentido, tanto del Conservatorio Oficial de Música de Almendralejo, la Escuela de Ballet de Almendralejo,Conservatorio Municipal Profesional de Danza de Montijo, la Escuela de Imagen Karmen Sánchez y la Escuela de Arte y Superior de Diseño de Mérida. Vuestra entrega y esfuerzo son el ejemplo para todos nosotros.
A las familias que nos han apoyado para hacer esto posible, aportando su tiempo y saber y que nos han acompañado desde el primer momento estando a entera disposición para lo que fuese necesario.
A los técnicos que han trabajado y nos han aportado todo su conocimiento y energía para que esta gigantesca producción haya funcionado perfectamente durante la representación.
Muy especialmente agradecer a los equipos docentes que se han volcado en este proyecto y que consiguen hacer realidad los sueños: gracias a todos.
Pero una producción como Oniria no sería posible sin el apoyo y el respaldo de una institución que ponga todos los medios a su alcance para hacerlo realidad: gracias al Ayuntamiento de Almendralejo que, junto a la empresa extremeña Progevents, han confiado en el trabajo de esta comunidad educativa y han hecho posible una vez más, que volvamos a navegar por el mundo de los sueños. Nuestro más sincero agradecimiento al Ayuntamiento de Almendralejo por seguir apostando por una educación más allá de las aulas y facilitarnos a los docentes todo lo posible para hacer realidad nuestros proyectos.
Ahora nos toca despertar del sueño que vivimos en la plaza de toros de Almendralejo, acompañados por más de mil personas que llenaron todos sus rincones, pero seguiremos trabajando para hacer posible muchas más Onirias. Hasta entonces, sabemos que las hadas siempre nos acompañarán… o las limbis.
